Figuras públicas llaman a no votar en la elección judicial: crece el rechazo desde la oposición

INFLUENCER GTO. La histórica elección judicial del próximo 1 de junio ha dejado de ser vista únicamente como un avance democrático. En cambio, se ha convertido en un campo de batalla político, donde diversas voces del ámbito político, académico y mediático llaman abiertamente a la ciudadanía a abstenerse de votar, denunciando lo que consideran un intento del oficialismo por tomar el control del Poder Judicial.
Entre quienes lideran esta campaña de rechazo están el expresidente Vicente Fox, el exconsejero del INE Lorenzo Córdova y la conductora de espectáculos Paty Chapoy, cuyas declaraciones en redes sociales han generado una fuerte controversia.
Una elección inédita envuelta en polémica
Por primera vez en la historia del país, más de 4 mil cargos judiciales —incluyendo ministros de la Suprema Corte y jueces locales— serán elegidos directamente por el voto ciudadano. Sin embargo, el diseño del proceso ha despertado críticas por la falta de información sobre los aspirantes, la ausencia de campañas formales y la complejidad de las boletas.
Aprovechando este clima de incertidumbre, varias figuras opositoras han lanzado mensajes instando a no participar. Para ellos, esta votación no representa un ejercicio genuino de democracia, sino un mecanismo de legitimación del control gubernamental sobre el Poder Judicial.
Redes sociales como terreno de batalla: nace el #DomingoNegro
Organizaciones civiles como Resistencia Civil Activa y Pacífica (RECAP) han convocado a una manifestación para el 1 de junio a las 11 a.m. en el Ángel de la Independencia, bajo el lema #DomingoNegro. La iniciativa busca visibilizar el rechazo a lo que califican como un proceso “simulado”.
Denise Meade, coordinadora de “México Unido”, expresó en redes:
“La elección judicial es una burla. ¡No legitimes esta farsa! Sal a marchar este 1 de junio”.
Chapoy, Fox y la oposición mediática
El rechazo no se ha limitado al ámbito político. Paty Chapoy, conductora de TV Azteca, sorprendió al publicar un mensaje directo y ofensivo:
“No votes por la farsa judicial, no seas cómplice de pendejos”.
La frase acompañó un cartel que rápidamente se volvió viral, avivando la discusión sobre el papel de los medios en este proceso.
Vicente Fox, por su parte, se sumó al llamado al abstencionismo desde su cuenta en X:
“Esto no es una elección democrática. No hay propuestas, no hay debates, no hay opciones reales. El 1 de junio no votes: no legitimes esta imposición”.
Lorenzo Córdova y el frente académico
Lorenzo Córdova, expresidente del Instituto Nacional Electoral, también criticó duramente el proceso, calificándolo como “una maniobra para subordinar al Poder Judicial”. A su voz se han sumado otros exconsejeros electorales como María Marván, quienes alertan sobre la opacidad en las reglas y la falta de garantías para un voto informado.

El INE responde: “Es irresponsable desacreditar el proceso”
Frente al creciente rechazo, Guadalupe Taddei, actual consejera presidenta del INE, defendió la legalidad del proceso y lamentó que exfuncionarios del instituto desacrediten el trabajo institucional:
“Es grave que quienes conocen de cerca el funcionamiento del INE promuevan el abstencionismo y cuestionen un proceso que jamás les tocó organizar”.
Taddei reiteró que la elección judicial se rige por un marco legal claro y que el papel del Instituto es garantizar que el voto se ejerza con libertad y certeza.
¿Participar o abstenerse?
El debate se ha polarizado. Para algunos, votar es una manera de defender la democracia frente a la concentración de poder. Para otros, no acudir a las urnas es una forma de protesta legítima ante un proceso que consideran manipulado desde su origen.
Lo cierto es que la convocatoria al abstencionismo ha encontrado eco en amplios sectores ciudadanos, alimentada por figuras mediáticas, políticos opositores y organizaciones civiles.
Conclusión: una elección bajo cuestionamiento
La jornada electoral del 1 de junio, lejos de consolidar el avance democrático que se esperaba, se encuentra ahora en el centro de una fuerte confrontación ideológica. La participación ciudadana se ve amenazada por el descrédito que sectores opositores han proyectado sobre el proceso, mientras el INE insiste en su validez legal.
Entre el llamado a votar para defender las instituciones y el llamado a no votar como forma de resistencia, el electorado enfrenta una decisión cargada de simbolismo político. El desenlace, cualquiera que sea, marcará un antes y un después en la relación entre ciudadanía, justicia y poder en México.